lunes, 19 de enero de 2009

El portazo / Patricia Gardeu

Pegó un portazo tras gritar: ¿por qué me casaría yo con veinte años?, y se fue a trabajar. Últimamente sólo sabía llorar. Su marido la había abandonado tras treinta años de matrimonio dejándola con el corazón roto y la hipoteca a quince años. Pero esa casa era demasiado grande para ella sola. Los hijos habían volado hacía años huyendo tanto de los gritos como de las caricias. Su trabajo no la contentaba. Sus amigos le parecían marionetas movidas por los hilos de un destino cruel y trágico. Las lecturas en las que se había refugiado años atrás le daban ganas de vomitar. Maldito dinero, pensó. Y entendió que los sueños se habían deshecho de tanto frotar lámparas sin genios dentro. El portazo que dio antes de marcharse fue uno, y sonó en toda la casa, no fue el primero, pero sí sería el último. Había perdido el control.

2 comentarios:

hatoros dijo...

Solo durante un momento. Al coger el coche, se dirigió al mar,lejos del frio del interior. Condujo durante seis horas seguidas.
Su amor enamorado de la niñez,la esperaba ansioso.Para amarla. Algo que ella olvidó con el de toda la vida.
Perdona Patricia. Me gusta, pero no he podido resistir la tentación.

hatoros dijo...

Gracias por escribir.